Si los proyectos dan forma a las relaciones comunitarias, ¿cómo debemos dar forma a los proyectos?
Amara es nombrada directora de un proyecto recién aprobado en el país X, que es un país que históricamente ha tenido conflictos violentos entre diferentes grupos étnicos. La situación parece haberse calmado ahora, salvo por algunos grupos insurgentes que viven como parias en zonas remotas.
En el lugar del proyecto, delega en Bahati para que sea el director de recursos humanos que supervise todos los procedimientos de contratación. Un día, aproximadamente un año después del inicio del proyecto, los trabajadores se enteran de que la obra ha sido bombardeada durante la noche. No está claro quién es el responsable del ataque, pero se rumorea que fue una respuesta a la injusticia percibida en el proceso de contratación. Al parecer, Bahati sólo había contratado a personas de su propio grupo étnico. Aunque no hay pruebas de que ninguna de las comunidades circundantes haya participado en el atentado, es casi seguro que algunos de sus miembros tienen vínculos con grupos insurgentes.
Al otro lado del mundo, la empresa Y pretende construir un parque eólico en una comunidad rural. La empresa se compromete a pagar un alquiler a los agricultores, que tendrán que ceder una parte de sus tierras de cultivo donde se construirán los molinos de viento. Sin embargo, tras unos meses de funcionamiento del parque eólico, estalla la violencia entre la comunidad. Resulta que mientras algunos miembros de la comunidad han sido compensados por la empresa, otros no han recibido ni un céntimo porque los molinos de viento no se colocaron en sus tierras. Sin embargo, se han visto afectados por el proyecto. El fuerte ruido de los molinos de viento vecinos es estresante para el ganado y parece que el proceso para decidir dónde se colocarían los molinos no ha sido completamente transparente. Así, este grupo de personas no compensadas se ha rebelado contra sus vecinos más afortunados. Además de la angustia de la comunidad, el proyecto se interrumpía constantemente, lo que suponía un coste de explotación inesperadamente elevado. Una comunidad antaño pacífica se ha convertido en una con mucha tensión.
En los dos escenarios, los proyectos han contribuido de forma diferente a los levantamientos. En el primer ejemplo, la tensión entre los dos grupos étnicos ya existía antes de la intervención de la empresa. En el segundo escenario, la comunidad se encontraba en un estado pacífico antes de la ejecución del proyecto. Aunque no se preveía, ambas empresas han desempeñado un papel importante en la configuración de las relaciones comunitarias al exacerbar o desencadenar las tensiones, lo que en última instancia ha aumentado el coste social y financiero de los proyectos.
Estos dos casos ilustran la importancia de evaluar cómo un proyecto puede afectar a las relaciones sociales sobre el terreno, así como crear graves riesgos para el propio proyecto. Debe realizarse un análisis de los conflictos, como parte del análisis del impacto social, y preparar de antemano múltiples opciones para mitigarlos. Algunas de las preguntas que vale la pena hacerse para evaluar la situación son*:
- ¿De qué manera el contexto social hace que las personas sean más vulnerables o resistentes al riesgo?
- ¿Cuáles son los mecanismos de la exclusión social? ¿Existen barreras sistemáticas a las oportunidades?
- ¿Existen aspectos del contexto social que favorezcan a unos grupos en detrimento de otros a la hora de acceder a los beneficios u oportunidades del proyecto?
- ¿Dónde están los actores que compiten por el poder y los recursos?
- ¿Qué relaciones o experiencias atraviesan las líneas de tensión o división?
- ¿Quién tiene más influencia o poder de decisión y por qué?
- ¿Cómo suele resolver los problemas cada grupo cultural?
- ¿Cuáles son las normas sociales más importantes en cuanto a género, edad, religión, estatus, rango, etc.?
- ¿Cuál es la dinámica de poder entre los distintos grupos?
- ¿Hasta qué punto se confía en que los agentes e instituciones del sector público se comprometan de forma significativa a abordar y resolver cuestiones difíciles?
- ¿Qué tipo de conectores tienen los grupos y cómo han intervenido en la resolución de conflictos anteriores?
Además de una adecuada evaluación del impacto social, una buena manera de prevenir y abordar estos riesgos es establecer canales de comunicación sólidos y de confianza entre la gestión del proyecto y las personas o comunidades afectadas o potencialmente afectadas, donde se puedan plantear y abordar las preocupaciones y quejas. Tal es la función de los Mecanismos de Reclamación (GRM) como el Mecanismo Independiente de Reclamación (MIR) del Fondo Verde para el Clima (GCF).
Dada la importancia de estos GRM para obtener buenos resultados en materia de desarrollo, así como para la sostenibilidad y la integridad financiera de los proyectos, todas las Entidades Acreditadas (EA) de la GCF están obligadas a tener sus propios GRM para responder a las quejas a un nivel más cercano al proyecto. El mandato de MIRes también desarrollar la capacidad de este amplio "ecosistema" de GRMs para asegurar que las quejas puedan ser escuchadas y atendidas en la etapa más temprana posible. Se espera que la creación de este sólido ecosistema para atender las quejas, junto con una planificación adecuada antes de la ejecución de los proyectos, permita a GCF cumplir su promesa de ayudar a los países en desarrollo a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar su capacidad de respuesta al cambio climático.
*Los ejemplos de preguntas anteriores se han extraído y modificado del libro de Brian Ganson titulado "Management in Complex Environments: Questions for Leaders" y de la publicación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre Evaluación del Impacto Social.